Hoy también es el día del Señor
Durante los muchos años que acudí a la universidad Gregoriana, el jueves era día festivo. Probablemente se trataba de una costumbre jesuítica ya que en las Reducciones del Paraguay también dejaban de trabajar los jueves. En la liturgia, el día del Señor es el domingo, día en el que conmemoramos la resurrección de Jesús, pero en la vida de cada día reconocemos que Dios es el alfa y el omaga, el señor del tiempo. Por eso he iniciado mi día bastante baldado pero contento porque me encuentro con una nueva oportunidad de ser feliz, de contar con los amigos, de servir para algo y de acopañar a quien lo necesite.
Buenos días!
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6 comentarios:
Preciosa forma de iniciar el día. No me queda claro por qué los jueves específicamente son el día del Señor. Hablas de la vida de cada día, lo cual tiene mucho sentido, pero luego (o antes cronológicamente) lo limitas al jueves...
Pero gracias por la reflexión, que me ayuda a pasar estos azarosos días.
Por lo visto me he expresado mal. Digo que litúrgicamente los cristianos llaman día del Señor al domingo porque en ese día resucitó Jesús, pero que, en realidad,todos los días son igualmente días del Señor, porque Dios creó el tiempo y la vida y el mundo. He añadido un recuerdo personal e histórico: pedagógicamente, los jesuítas no daban clase los jueves y no trabajaban los índios en sus reducciones. Desconozco el motivo, pero me imagino que se trataba de descansar y renovar energías a mitad de semana.
Añado: en estos momentos, para mí el viernes es un día cualquiera, pero sospecho que para vosotros es la antesala de un tiempo prometedor.
Ya me parecía a mí. Lo que me inspiraba en tu reflexión era que cada día era el día del Señor. No sólo los jueves. Ahora bien, que como estudiante de jesuitas, eso de hacer fiesta el jueves me parece estupendo!
Buen finde a todos!
Nos hemos acostumbrado al ritmo del trabajo y el consumo, sin mirar al cielo bien para seguir el curso del sol, bien para dar gracias a Dios. Con ello olvidamos la verdadera fuente de nuestras horas.
Me gustaría sentir que nada importa el día de la semana o la hora del día en el convencimiento de que todos son un motivo de alegría por la compañía de los seres queridos, la dignificación del trabajo bien hecho y la gracia que Dios nos concede en cada instante.
Me alegro al notar, Juan Mari, que estás menos baldado que ayer: buena señal.
Un abrazo
Nacho
Una formula que nunca falla: ¡comenzar siempre el día alegre por tener la oportunidad de volver a gozar de todo lo que Dios ha puesto a nuestro alcance y de disfrutar de la compañía de los nuestros!.
El trabajo dignifica al hombre, o eso al menos dicen los que tienen la obligación de currar; y la razón por la cual se instauró el día de descanso, que entiendo venía dado para dar gracias a Dios, ha sido sustituido por la necesidad de dar las gracias al patrón, por dejarnos unas horas de asueto.
Y luego dicen, veo que la corona Española, bajo la influencia o directrices de la Iglesia, ya implanto al igual que muchos otros derechos primero y antes que nadie, el descanso semanal; bastante antes de que el socialismo reivindicase el derecho del trabajador al dia libre.
prueba
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